Un repaso por las principales tendencias virtuales que llegaron para quedarse en el Real Estate y el sector desarrollista.

El desafío de reinventarse en épocas de aislamiento llevó al sector del Real Estate y la construcción a pensar en nuevas modalidades de trabajo. Tal parece que la transformación digital llegó para quedarse y que el contexto marcado por el Covid-19 impulsó su despliegue.

En este marco, el sector asiste a un cambio de paradigma en varios niveles; también se aceleraron las tendencias de innovación que ya se venían registrando antes de la pandemia. Un caso destacado en esta línea es del de la desarrollista GNI, que implementó, en los últimos años tecnologías para optimizar los procesos y la experiencia de compra. “El establecimiento de la cuarentena y la limitación para circular potenció el uso de esas herramientas, especialmente en la generación de contacto, para mostrar los emprendimientos y para enviar información”, cuenta Pablo Rosa, director comercial de GNI.

La empresa tiene un sistema de relacionamiento con el cliente (CRM, por sus siglas en inglés) a medida, que facilita la gestión y los procesos de administración y relacionamiento con clientes e inversores. El contacto y envío de información se realiza a través de medios digitales: planos digitales, recorrida en 360 grados de departamentos y la posibilidad de la firma digital para quien lo solicite son algunas de las herramientas empleadas. “Para las personas que quieren ver el emprendimiento, conocer el departamento modelo y/o realizar una consulta presencial, GNI asigna turnos con los protocolos correspondientes”, destaca Rosa.

Impulso extra

“Sin dudas, el rubro del Real Estate cordobés es uno de los más tradicionales del mercado. Lo que hizo la pandemia fue adelantar un proceso de digitalización que se viene dando hace tiempo en distintas partes del mundo. Los consumidores de por sí tienen todo al alcance de su mano: basta con preguntarle a Google dónde, cómo, cuando o qué para recibir miles de respuestas”, subraya Nicolás Kairuz, cotitular de Gestión Inmobiliaria. Así, los inmobiliarios debieron adaptar sus prácticas a lo digital y hacer vivir a través de ese medio una experiencia de cercanía para el cliente, a pesar de la distancia: videoconferencias, recorridos virtuales, certificaciones remotas, notificaciones por WhatsApp y  reservas por transferencias bancarias se consolidaron como recursos.

A la lista anterior, Kairuz agrega: “mostrarnos al máximo en las redes sociales, usar videos con drones, recorridos con estabilizadores y todas las herramientas posibles para destacar las propiedades; en fin, una combinación del marketing on line con lo off line, y la carrera por el posicionamiento a través de campañas”.

En cualquier caso, lo más valioso que existe hoy es la información y sólo quien agrega valor a lo que hace logra destacarse. “La digitalización nos puso a todos los inmobiliarios a la par. El gran impacto está en la coherencia entre lo que se muestra y entre lo que realmente uno es. Por una cuestión generacional, en Gestión Inmobilaria no nos costó el proceso de adaptación, pero sí nos llevó a invertir mucho más en portales, en medios y en redes”, remarca el ejecutivo.

En el campo de las operaciones y transacciones, se observa una transición de la garantía propietaria hacia otro tipo de garantías. Tradicionalmente, la disponibilidad de una garantía propietaria como requisito para alquilar ha sido un problema para muchas de las 9 millones de personas que alquilan en Argentina.

Durante décadas, el paradigma de la garantía propietaria fue la única opción considerada por los dueños a la hora de alquilar su inmueble. Actualmente, se consolida el uso de otro tipo de garantías que resultan más beneficiosas tanto para el inquilino como para el propietario.

En esa línea, GarantíaYa se planteó resolver este problema ofreciendo la posibilidad de obtener una garantía demostrando ingresos propios, de personas cercanas o un certificado de estudios. La empresa ofrece una solución alternativa a la garantía propietaria para alquilar viviendas, locales u oficinas, firmando como garante el contrato de locación. “La gestión se puede realizar en dos horas y 100 por ciento on line, ya que la empresa utiliza la firma digital en la firma del contrato. Es imperativo innovar para adaptarse a los nuevos tiempos”, señala Gustavo Daniszewski, director general de GarantíaYa.

Firma digital

Actualmente, y más aún en el contexto de aislamiento, la firma digital se aplica en contratos de cualquier tipo: recibos de sueldo, documentación laboral en general, comercial, bancaria, administrativa, judicial y educativa. Cada vez son más los ámbitos que la requieren ante la imposibilidad de encontrarse cara a cara.

Lo más relevante en estas circunstancias es que el trámite de la garantía y la firma del contrato de alquiler se pueden realizar 100 por ciento on line gracias a la firma digital. Desde el punto de vista legal tiene el mismo status que la firma de puño y letra, y posee altos estándares de seguridad. Se presume que toda firma digital pertenece al titular del certificado digital.

Su mayor beneficio es la inmediatez y el alcance global (se pueden firmar contratos desde cualquier lugar del mundo) y la reducción de costos, porque no hay que certificar contrato mediante escribano. Además, el documento es válido digitalmente y no hay que archivarlo en una carpeta física, lo que resulta beneficioso para el cuidado del medioambiente. Se puede copiar el archivo las veces que sea necesario y todas las versiones son válidas: siempre se tendrá el documento original y la validez legal la da la plataforma digital donde se origina.

Finalmente, las limitaciones para visitar inmuebles llevaron a las empresas a ofrecer diversos recursos digitales a los clientes, que encontraron en la tecnología una aliada clave al momento de conseguir un inmueble para alquilar o para comprar. Sin dudas, aunque pase la pandemia, el Real Estate será más digital que nunca.

“La gestión se puede realizar en dos horas y 100 por ciento on line, ya que la empresa utiliza la firma digital en la firma del contrato. Es imperativo innovar para adaptarse a los nuevos tiempos”, explica Gustavo Daniszewski, director general de GarantíaYa.

Otra vuelta de tuerca

Otro ejemplo de la transción acelerada al mundo digital pasa por el crowdfunding. Un caso destacado en esta tendencia es el de SimplEstate, una red de agentes concebida como un nuevo canal de comercialización para facilitar conversaciones “uno a uno” que permitan el asesoramiento con altos estándares de calidad a los interesados en una gestión eficiente e inteligente de su dinero. Esta plataforma de financiamiento colectivo destinada al Real Estate permite invertir con montos desde 10 mil pesos por mes y obtener una renta en dólares atractiva a corto plazo. Cuenta con su propia red, conformada por un equipo de profesionales independientes que asumen la distribución y comercialización de las inversiones orientadas a los proyectos de la marca de una manera autónoma y siguiendo los principios que rigen a la empresa. La red proporciona oportunidades de inclusión a segmentos de la industria del ladrillo que no cuentan con esa opción y les da la alternativa de involucrarse en inversiones en el mercado del Real Estate.

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